El trabajo con personas adictas abre la posibilidad a nuevos pensamientos. El vacío generado por las formas de vínculo actuales nos aleja de una vida en la que seamos capaces de gozar, y de alguna manera nos pone la adicción en el camino. Ya sean sustancias, dispositivos o situaciones, las adicciones están inmersas en nuestra vida diaria, y nos alejan de la meta que tenemos de ser felices.
Este es un texto psicoanalítico en el que se explica la importancia del trabajo en grupo y de la formación del vínculo en el contexto de la adicción.
El GRUPO EN LAS ADICCIONES – Lic. Guiomar Doti* y Lic. Paula Inés Brecciaroli
Lacan nos decía en el Discurso de Roma de 1956 “es mejor que renuncie quien no pueda unir su horizonte a la subjetividad de su época”[1].
Hoy en día es frecuente escuchar en las admisiones que la práctica del consumo está vinculada a grupos de pares “Empecé a fumar con los pibes de la plaza”, “Yo paro con los de la esquina”. Cuando se indaga por este tipo de vínculo, suelen dejar en evidencia un lazo afectivo lábil ya que el encuentro se produce exclusivamente a través de la acción del consumo. El vínculo no continua en otras actividades y entre los integrantes, la ausencia no es relevante, ni notoria. El tóxico, como único objeto común, funcional al lazo, los amontona.
Destacan como acción de reunirse o encontrarse, a un modo pasivo y…
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